viernes, 24 de abril de 2015

Martín Lutero


Este tipo de ojos entornados fue Martín Lutero, el reformador que desquebrajó la hegemonía del catolicismo. Nació en  1483, en Eisleben, Turingia, Alemania, un lugar tal que así:



Hasta 1505, Lutero, era como tantos jóvenes de hoy en día: estudiante de derecho, gozador de los placeres de la vida, melancólico a rabiar y blanco de los demonios (ver anécdota). Pero un día volviendo de visita de la casa de sus padres le sorprende una tormenta eléctrica, intenta refugiarse pero cae un rayo tan cerca de él que casi le arrebata la vida. Queda tan impresionado por sentir la cercanía de su propia muerte que decide hacerse nada más y nada menos que... ¡Monje!

Desde hace tiempo no era un secreto para muchos que las altas jerarquías del clero estaban infectadas de personajes que habrían cometido multiplicadas veces los siete pecados capitales y hasta inventado otros nuevos, pero a raíz de un viaje que realiza nuestro joven Lutero a Roma ve con sus propios ojos la frivolidad con la que esas gentes viven y gozan del dinero que sacan a los más pobres de Europa, que por aquel entonces eran extremadamente pobres. Para colmo de su indignación, Roma emprende una campaña de venta de bulas eclesiásticas de decretos de indulgencias (que servían según la Iglesia para perdonar los pecados de la gente y que no fueran al infierno) con el fin de pagar los costes que requería la reconstrucción de la Basílica de San Pedro.

Entonces, en 1517, el ya enfurecido y harto monje basado en John Wyclif y Jan Hus escribe sus 95 tesis de Cuestionamiento al poder y eficacia de las indulgencias y las clava, según la leyenda, en la misma puerta de la Iglesia de Wittenberg para que estuviera a vista de todos, aunque casi nadie supiera leer.

Lutero entendía al ser humano conformado por el hombre exterior y el interior, el exterior debía salvarse al realizar actos buenos con todo lo exterior (los otros, el mundo) lo que propiciaría cierta tranquilidad para que el hombre interior pudiera salvarse por medio de las lecturas de la Biblia (todos debían leerla no sólo el clero como hasta entonces) y la fe en Dios. Sólo Dios podía perdonar los pecados del ser humano, no necesitaba intermediarios (sacerdote, iglesia), así, abogaba Lutero, por el trato directo con Dios (sacerdosio universal). También propuso reducir a tres los siete sacramentos de la Biblia: Bautismo, Confirmación, Eucaristía, Penitencia, Unción de los enfermos, Orden sacerdotal y matrimonio.

En la bula de León X (1520) se decide excomulgar a Lutero si no se retractaba, pero éste, que ya tenía 37 años, pero conservaba el espíritu de la juventud y la fe en su propia moral no se retracta sino que la quema en público en la universidad de Wittenberdonde él enseñaba.

Un año después se vuelve a insistir al rebelde Lutero para que se retracte por medio de la dieta de Worms a la que fue convocado por el nuevo Emperador, Carlos V, pero Lutero rehusó  de nuevo "porque no es bueno ni sincero obrar contra la propia conciencia" y fue declarado proscrito (Vete del Imperio, Lutero). 
Carlos V


Obviamente, Lutero, no estaba solo en esto, estaba bien respaldado ideológica y monetariamente por el príncipe Federico el Sabio quien le esconde cuando se le echa del Imperio, además de contaba con el apoyo de la pequeña burguesía, los humanistas alemanes que necesitaban liberarse de la rigidez de la religión y artistas como Durero o Holbein. 
Alberto Durero
Federico III el sabio.


Con el apoyo que tenía y las numerosas ciudades que se niegan a acatar el Edicto de Worms (1521) se lleva a cabo al fin la Reforma protestante, que es llamada así por los príncipes que protestaron contra los edictos de las dietas (asambleas políticas y legislativas).

Sin embargo en las revueltas campesinas acaecidas en Alemania contra los abusos de los señores feudales, Lutero, muestra un total rechazo ya que consideraba que el Evangelio  excluía la violencia y la rebelión. Esto fomenta que los señores se sientan justificados ante sus abusos y abusen todavía más. Los campesinos que esperaban el apoyo de Lutero se sienten defraudados.

Lutero de mayor se pelea con muchos de sus seguidores y colegas de Reforma, además se vuelve bastante antisemita ("Sobre los judíos y sus mentiras"), cuando en su juventud había escrito cosas como "Jesucristo fue judío por nacimiento".


El reformador muere el 18 de Febrero de 1546 en una visita a su ciudad natal, Eisleben, vencido por la enfermedad, el cansancio y el invierno sajón.

En 1555 se firma al fin la paz religiosa de Aubsburgo, donde se aceptaba el Luteranismo, sin embargo cualquiera no era libre de seguirlo si su rey no lo seguía. 



  • «Les ruego que dejen mi nombre en paz. No se llamen así mismos 'luteranos', sino Cristianos. ¿Quién es Lutero?; mi doctrina no es mía. Yo no he sido crucificado por nadie... ¿Cómo, pues, me beneficia a mí, una bolsa miserable de polvo y cenizas, dar mi nombre a los hijos de Cristo?. Cesen, mis queridos amigos, de aferrarse a estos nombres de partidos y distinciones; fuera todos ellos, y dejen que nos llamemos a nosotros mismos sólamente cristianos, según aquel de quien nuestra doctrina viene"
  • «¿Qué es Dios para los cristianos? Un gran castillo, un poderosoescudo, una buena arma».
  • "El corazón de un hombre es una rueda de molino que trabaja sin cesar; si nada echáis a moler corréis el riesgo de que se triture a sí misma." 
  • «Pero desde que la novia del demonio, la Razón, esa bella prostituta, interviene y se cree que es sabia, y que lo que dice, lo que piensa, viene del Espíritu Santo, ¿quién puede ayudarnos, entonces? Ni los jueces, ni los médicos, ningún rey ni emperador, porque [la Razón] es la mayor puta del diablo».


Frases de Martín Lutero:


jueves, 16 de abril de 2015

La Reforma Protestante: Causas

El pueblo europeo del siglo XVI, subordinado a una Iglesia corrupta y decadente fue paulatinamente indignándose hasta culminar en movimientos religiosos que cuestionaron los dogmas de la Iglesia y el poder del Papa, esta revolución se llamó La reforma protestante.

El acto que simboliza el comienzo de la reforma protestante es el de un monje del Sacro Imperio Romano Germanico llamado Martín Lutero, en el año 1517, publicando sus 95 tesis contra la venta de indulgencias en la puerta de la Iglesia de Wittenberg.



Causas:

  • Causas religiosas: El clero pedía dinero a cambio del perdón parcial o total de los pecados de las almas en el purgatorio (Querellas de las Indulgencias). El Papa León X para terminar de construir la Basílica de San Pedro en Roma promovió esta práctica entre los fieles, sean pobres o ricos. Además el clero parecía más interesado en amasar fortunas y territorios que en transmitir la palabra de Dios y esto era visto a simple vista cuando muchos de ellos casi no tenían conocimientos sobre La Biblia y los dogmas de su propia fe pero sí estaban interesados en sacar dinero hasta de los más pobres para sustentar una vida desenfrenada que incluía saltarse el celibato. Este desengaño de las autoridades eclesiásticas ya venía desde los tiempos del Cisma de Occidente (1378-1417) donde hasta tres obispos se disputaron el cargo de pontífice demostrando ante los ojos de toda Europa que el Papa al fin y al cabo era como cualquier ser humano con anhelos de poder. 
  • Causas sociales: A los nobles alemanes les interesaba arrebatar territorios a la Iglesia ya que veían amenazado su poder con los nuevos ricos gracias a las riquezas traídas de América. Los comerciantes estaban hartos de que la Iglesia obstaculizara sus intereses, ya que la Iglesia católica de siempre había visto con malos ojos el enriquecimiento del hombre, algo que obviamente no daba ejemplo pero debía defender contra sus adversarios pues estaba dentro de las enseñanzas de La Biblia. Los campesinos que eran tratados como esclavos llevaban tiempo protagonizando revueltas contra la Iglesia.
  • Causas políticas: Ya ha ocurrido la disolución del orden medieval pero la Iglesia católica no se ha adaptado a este cambio. La Iglesia empieza a perder poder e influencia, los reyes y príncipes prefieren asumir el mando de sus reinos resultando la Iglesia muy molesta para el logro de sus fines, sobre todo para el emperador alemán. Se refuerza el espíritu nacionalista por lo que aceptar el poder de Roma resulta más intolerable, en concordancia con esto se pide crear Iglesias nacionales. 
  • Causas culturales: Surgió el Renacimiento en el S. XV., un movimiento cultural antropocéntrico, que revaloriza al hombre y a todo lo relacionado con la actividad humana (Humanismo). De este movimiento surge un espíritu más crítico contra todos los dogmas y una cultura laica que no estuviera sometida al poder de Roma. Entre los humanistas que influyeron más directamente en la Reforma protestante destaca Erasmos de Rotterdam que defendió la libre interpretación de la Biblia. La difusión de los textos reformistas así como de los textos sagrados se vio favorecida por la invención de la Imprenta en 1459. 
    Erasmo de Rotterdam

Material Audiovisual:

https://www.youtube.com/watch?v=SmFAgq9GoSI
https://www.youtube.com/watch?v=RItIptwhsSM

martes, 7 de abril de 2015

Greguerías

Allá por principios de la España del siglo XX, en la villa y corte de Madrid, en una calle entonces mucho más joven, y en una habitación en la que si un murciélago entrara se volvería loco o sabio, Ramón Gómez de la Serna esperaba que lo insólito y lo cotidiano descendieran del hiperespacio a su receptiva pluma para unirlos en lo que él llamaría "greguerías". 

Según las definiciones dadas por el propio Ramón greguería es y no es:


  • No es la greguería una frase célebre. No puede figurar en el reverso de una hoja de almanaque. No son reflexiones ni tienen nada que ver con ellas.
    No es un paradigma y menos un apotegma, ni es un veredicto, que es juicio emitido demasiado seriamente y con demasiada reflexión y autoridad.
    Verdadero pescador de greguerías, me paso días y días esperando las que lo son y tirando de nuevo al agua las que son sólo sardinas....se está siempre cerca de una greguería, pero nunca se la toca.
    ¿Frase lapidaria? La greguería no sale de debajo de ninguna lápida de tumba.
    Ni debe haber en ella sentimentalismo rabilargo, ni cursilería rabicorta, ni descripcionismo.
    Tampoco es aforística la greguería; lo aforístico es enfático y dictaminador. No soy un aforista.
    ¿Se queda entonces en metáfora?Todo lo material y lo inmaterial pueden ser objeto de metáfora.Todas las palabras y las frases mueren por su origen correcto y literal, no llegando a la gloria más que cuando son metáforas, porque la metáfora las hace abstractas y embalsamadas.
    La metáfora multiplica el mundo, no haciendo caso al retórico que prohíbe enlazar cosas sólo porque él es impotente para lograrlo.
    Humorismo + metáfora = greguería
  • Me la concede esa adolescencia de la vida que va pareja de nuestra adolescencia o de nuestra vejez. Tienen que ser lentas y naturales. Son una gota de los siglos que atraviesa mi cráneo.
  • Lo que gritan confusamente los seres desde su inconsciencia
  • El atrevimiento a definir lo que no puede definirse, a capturar lo pasajero, a acertar o a no acertar lo que puede no estar en nadie o puede estar en todos.



Ejemplos:

  • Aquel tipo tenía un tic, pero le faltaba un tac; por eso no era un reloj.
  • El agua se suelta el pelo en las cascadas
  • La muerte es hereditaria
  • El amor nace del deseo repentino de hacer eterno lo pasajero
  • El psicoanálisis es el sacacorchos del inconsciente.
  • El estanque es una isla de agua.
  • El más pequeño ferrocarril del mundo es la oruga.
  • El cisne es la S capitular del poema del estanque
  • En la gruta bosteza la montaña
  • El más pequeño ferrocarril del mundo es la oruga
  • Las erratas son las hermanas de las ratas
  • La pistola es el grifo de la muerte.
  • En la noche helada cicatrizan todos los charcos.
  • Tocar la trompeta es como beber música empinando el codo.
  • Cuando una mujer chupa un pétalo de rosa parece que se da un beso a sí misma
  • Cuando anuncian por el altavoz que se ha perdido un niño, siempre pienso que ese niño soy yo.
  • La bufanda es para los que bufan de frío
  • El bebé se saluda a sí mismo dando la mano a su pie.
  • Los recuerdos encogen como las camisetas.
  • Aquella mujer me miró como a un taxi desocupado.
  • Estamos mirando el abismo de la vejez y los niños vienen por detrás y nos empujan.
  • Los ceros son los huevos de los que salieron las demás cifras.
  • La morcilla es un chorizo lúgubre.
  • Entre los carriles de las vías del tren, crecen flores suicidas.
  • Aburrirse es besar a la muerte
  • La cabeza es la pecera de las ideas
  • Era tan moral que perseguía las conjunciones copulativas
Algunas ilustraciones greguerianas: